Los colores influyen en el estado de ánimo de las personas. En Aquore quieren que llevemos esa energía positiva que causan algunos colores a los baños de nuestra vivienda. Descubre cómo.
Los colores pueden ponernos tristes o contentos. En un mal día, los colores más oscuros pueden hacer que empeore nuestro ánimo. Pero si nos rodeamos de colores llamativos, puede mejorar
Esto nos lo afirman diversos estudios que constatan que los colores influyen en el estado de ánimo de las personas. Es la conocida cromoterapia o colorterapia.
Por ejemplo, los colores excitantes y alegres son rojo, el naranja y el amarillo. Estos animan e invitan a hacer cosas, a cargarse las pilas de optimismo y dar un paseo al frente.
Por otro lado, están colores tranquilos, más neutrales y que aportan tranquilidad a una estancia. Aquí incluimos verde, al azul y al violeta. Muy habituales, sobre todo el azul en el caso de habitaciones o baños.
También hay que hablar del color rosa, que transmite inocencia y buenas intenciones, armonía… Siempre se ha relacionado con habitaciones de bebés o de niñas. Pero realmente puede adaptarse a muchos rincones tranquilos de un hogar.
Aun así, si hablamos de colores neutrales por excelencia, los ganadores son los tonos fríos, que simbolizan pureza y sencillez. Es aquí donde habitan los colores beige y blancos. Digamos que no tienen ningún tipo de efecto sobre las personas. No dicen nada. Pero quedan bien.
En esta lista de colores no podía faltar el negro. Es un color que se ha puesto muy de moda en decoración de hogares, pero transmite pesimismo y tristeza. Aunque también es serio y elegante. Algo parecido ocurre con el gris, que empieza a ser uno de los colores básicos y prácticamente imprescindibles en una vivienda moderna.
¿Sabes ya de qué color vestir tu baño? Aquore puede ayudarte.