La Asociación de Empresas del Sector de las Instalaciones y la Energía (Agremia) recuerda cómo se puede ayudar a gestionar mejor el uso del agua potable implementando sencillas medidas en casa durante el confinamiento.
Además de contar en casa con sistemas que pueden favorecer el ahorro de hasta un 50% en el consumo de agua y, en consecuencia, en la factura (grifos monomando o con reductores de caudal, cisternas con doble descarga, etc.), desde Agremia se aconseja también seguir, durante la emergencia sanitaria, los hábitos diarios con responsabilidad:
Al entrar en casa, se recomienda lavarse bien las zonas expuestas, pero preferiblemente ducharse, aunque no debe confundirse con darse un baño.
El lavado de manos eficaz debe durar entre 1 y 2 minutos, siguiendo sus cinco fases: mojado, enjabonado, frotado, aclarado y secado. Es importante no dejar correr el grifo durante el enjabonado y tampoco cuando nos lavamos los dientes.
Al volver de la calle en las situaciones excepcionales que establece el estado de alarma (sacar a pasear al perro, ir a trabajar, a la compra o a la farmacia, etc.), se acnoseja meter la ropa exterior en una bolsa con cierre hermético para lavar (con lejía a 60-90 grados), evitar sacudir esta ropa antes del lavado y, después, dejar que se seque completamente.
Poner una papelera en el aseo para evitar realizar descargas innecesarias en la cisterna.
Los cubiertos, vasos, platos y demás utensilios reutilizables se deberán lavar con agua caliente y jabón o preferiblemente en el lavavajillas. Es importante utilizar este electrodoméstico una vez al día cuando esté completamente lleno.
Comprobar que los sistemas domésticos funcionan correctamente y no tienen fugas. Por ejemplo, vigilando que los grifos están correctamente cerrados y que los cabezales de las duchas no están bloqueados.
Las superficies del baño que se tocan con frecuencia como son los pomos de las puertas, el inodoro, grifos, etc., deben ser limpiadas con material desechable y desinfectadas diariamente con una solución doméstica que contenga un 98% de agua y un 2% de lejía. Este desinfectante se debe preparar el mismo día que se va a utilizar.
Agremia reconoce, que, en estos días de confinamiento en casa, en la que están conviviendo varias personas, resulta complicado llevar a cabo estas prácticas diarias, “más aún cuando hay que seguir a rajatabla las indicaciones de higiene personal y de limpieza de las distintas superficies o materiales expuestas al virus”. No obstante, considera, que son hábitos necesarios para vencer el coronavirus.