Uno de los mejores métodos para generar agua caliente sanitaria son los termos eléctricos. Cuanto mayor es la capacidad del termo eléctrico, mayor potencia eléctrica necesitará para calentar el volumen del agua de su interior, pudiendo ser desde 20 litros hasta 200 litros.
Las redes domésticas de suministro de agua, son redes presurizadas. El termo eléctrico presente en estas redes, es el encargado de producir agua caliente. Al calentar agua en una red presurizada, la presión en la red aumenta, pudiendo superar los 10 bares, presión máxima que soportan algunos elementos de la red. Este aumento de presión es sustancialmente más peligroso en redes con una presión ya de por si alta y si disponemos de un termo con un volumen superior a 80 litros. Con el fin de proteger nuestro termo eléctrico, así como los elementos de nuestra red doméstica, siempre debemos instalar junto con él una válvula de seguridad para termo.
VÁLVULA A·80 X·FLOW y VÁLVULA DE SEGURIDAD THERMO, UNA COMBINACION PERFECTA
La válvula A·80 X·FLOW de ARCO, es una válvula especialmente diseñada para termos eléctricos. Su principal característica es que tiene una mayor sección de paso para el agua, permitiendo un mayor confort de caudal en la red de agua caliente de la vivienda.
ARCO lanza la válvula de Seguridad Thermo, pero con un perfil más aerodinámico para reducir las pérdidas de carga al máximo.
Ambas válvulas están fabricadas en latón CW617N. Para una mayor estanqueidad, los materiales utilizados han sido, por un lado, una junta de cierre de EPDM para resistir mejor a las altas temperaturas, y por otro, una junta de cierre de la válvula de seguridad fabricada en goma de silicona para una mayor durabilidad.
El cuerpo de la válvula de Seguridad Thermo, además de estar fabricado en latón CW617N, cuenta con los muelles en acero inoxidable AISI304. A su vez, dispone de un doble recubrimiento para protegerlo de las inclemencias: una capa de níquel seguido de una fina capa de cromo que le otorga protección extra y brillo, mejorando así su aspecto final. Los componentes mecánicos se han fabricado en POM y PA, ambos polímeros de gran resistencia para salvaguardar el muelle principal de una posible oxidación por electrólisis.